El oficio de escritor tiende a ser mitificado, posiblemente, porque la escritura tradicional es un proceso solitario y totalmente opaco a los lectores, que sólo reciben la obra una vez está completamente terminada. El "lifelogging” del proceso de escritura equivale a monitorizar todo el desarrollo creativo de una obra. Esto tiene dos ventajas principales. Una, que el hecho de hacer transparente el proceso de escritura ayuda a desmitificar la figura del escritor, y esto puede animar a muchos a escribir. Y dos, que el proceso mismo de creación es de gran interés, explicar los detalles de cómo se ha creado una obra literaria, desde la idea inicial al texto final, es muy interesante y el "logging” resultante puede ser, por qué no, un objeto de un modelo de negocio. En cine, el "cómo se hizo” es uno de los extras que aportan valor a las ediciones en DVD de las películas. Este "logging” o "cómo se hizo” de la obra literaria puede dar también valor añadido.
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